Errores Comunes en los que Caen los Spas Sostenibles

“El objetivo de las empresas verdes debe ir más allá de la parte financiera y los ahorros que puede representar el inclinarse por esta opción; tiene que ver también con comunicar los esfuerzos de responsabilidad social corporativa de la empresa a los clientes y las partes interesadas”

Ser un Spa que apuesta por la alternativa ambiental o sostenible es la tendencia, que en el mediano y largo plazo seguirán de forma todos aquellos negocios de este tipo que sean parte de la industria Spa; no obstante, se debe tener claro que las iniciativas que dan origen a la esencia de esta opción son vastas y complejas, en muchas ocasiones, por lo que se debe estar preparado y contar con el conocimiento suficiente para saber los verdaderos alcances que tendrá el adoptar dicha postura ambientalista.

Nadie pone en discusión que el objetivo de ser un Spa verde es promover la sostenibilidad ambiental y social, pero no se deben obviar objetivos menos importantes como aquellos relacionados con las directrices relacionadas con prácticas laborales y trabajo decente, derechos humanos, sociedad y responsabilidad de producto, así como cada una de las subcategorías que comprenden.

Es decir, se trata de ver el bosque en su conjunto y no sólo un árbol, de ahí que haya tantas y tan dispares ideas sobre lo que es ser verde o sostenible, de que a la hora de formular objetivos y prácticas de trabajo que argumenten su sostenibilidad, se caiga en lugares comunes y  por consecuencia, se pongan de manifiesto errores  fuera de toda proporción.

Las fallas de origen de decirse “green”

Como ya se mencionó líneas arriba, ser un Spa verde con calidad pasa por dar prioridad a la sostenibilidad ponderando igualmente el desempeño financiero, ambiental y social, en vez de sólo enfocarse en el aspecto financiero.

Otra omisión que no se debe permitir es la falta de retroalimentación escuchando a los clientes y a los asesores especializados en materia de sostenibilidad, ya que siempre pueden proporcionar ideas nuevas, información y conocimientos, verificación de datos , o simples comentarios que pueden ayudar a mejorar a que el Spa verde sea mucho mejor.

Una buena dirección y gestión en este tipo de negocios debe buscar compararse en todo momento con su competencia, en lugar de presentarse como una alternativa única. En la medida en que compare sus resultados haciendo hincapié a su administración y tomando como punto de referencia a los demás Spas que van en la misma dirección que él, los puntos de comparación serán más interesantes y sobre todo, servirán por sí mismos como generadores de información que den explicación de porqué sí es exitoso o no.

Por otra parte, respecto a las metas de sostenibilidad que se proponga, el Spa verde, al igual que cualquier negocio, debe trabajar con objetivos medibles y alcanzables; es decir, trabajar objetivos pertinentes y realistas, y en consonancia con los objetivos generales de la empresa. En este sentido, debe dar a conocer sus logros y actividades de sostenibilidad a través de los diferentes medios de comunicación, especialmente aquellos que impactarán en el cliente y en los posibles proveedores y socios.

De igual forma, no se deben descartar aquellas oportunidades sostenibles porque simplemente son más costosas o encierran cierto grado de complejidad e incluso porque el costo-beneficio no se refleje de forma inmediata, pensar de esta forma reduce en extremo las posibilidades de trabajar dentro del marco sostenible y de innovar para sorprender a los clientes que buscan este tipo de alternativas ligadas al bienestar.

Los clientes se muestran escépticos de las empresas que tienden a "alardear de sí mismas", por así decirlo. Si no hay ningún punto de referencia en la memoria de sostenibilidad, tales como comparaciones con otras empresas del sector, como se mencionó anteriormente.

Recuerde, no porque un Spa se autodenomine Spa verde significa que realmente lo sea y que esté haciendo las cosas bien. Sólo la coherencia, la transparencia (la transparencia conduce a la confianza) y la honestidad van a forjar su nombre como Spa sostenible.

Por tanto el Spa debe evitar caer en prácticas simples y formulas añejas de lo que es ser una empresa sostenible, porque en la medida que el negocio y quien lo gestione no articule su visión y estrategia de sostenibilidad, y se asegure de que está en consonancia con los objetivos de ser un Spa de este tipo, no alcanzará de forma completa el estatus que está buscando, tanto dentro como fuera del negocio: ser considerado como un verdadero Spa verde.