Los errores más comunes a la hora de crear contenidos
Una buena estrategia de marketing de contenidoses el resultado de la aplicación correcta de unas máximas que se dan por sentadas, ya que son pura lógica. Como por ejemplo: conocer a la perfección a nuestra audiencia.
Sin embargo, es un área que crea confusión
a las empresas hoteleras o de cualquier tipo.
Por ello, la web ConTuNegocio aporta un listado con los cuatro fallos más frecuentes que se cometen cuando se busca nutrir de información útil y original a los lectores.
1) Cuanto más, mejor. Es falso, aunque sí que es importante que la página esté actualizada. Pero esto no significa que se tenga que publicar para cubrir el expediente. Un planteamiento que puede llevar a recurrir al archiconocido “copiar y pegar”. Un collage de datos recogidos de diferentes páginas que no aportan calidad, el valor más importante para los lectores.
2) Como el post es bueno, se difunde solo. Los usuarios en su mayoría no van a acudir a buscar la noticia, sino que la empresa tiene que facilitar su difusión en redes sociales para lograr más impacto con una actitud activa. Una labor que se debe realizar teniendo siempre presente quién es el público objetivo de la compañía.
3) Las redes sociales son lo primero. Generar contenidos con el único leitmotiv de ser virales es absurdo, por mucho que, posiblemente, cumpla con creces la parte de la difusión y los social media comentada anteriormente. De hecho, las últimas tendencias apuntan a que se crea más interacción y compromiso (engagement) con los usuarios a través de búsquedas orgánicas (SEO) que mediante estas plataformas.
4) El marketing de contenidos es una carrera de fondo. No da resultados a corto plazo. Es necesario dar un tiempo a que las publicaciones alcancen una cierta popularidad. Esa fama se plasmará en los resultados que mostrarán los principales buscadores sobre la página web en cuestión.
Por otro lado, el portal WebMarketingToday profundiza en las equivoc
aciones más habituales cuando se quiere lanzar o mantener un blog:
- Una mala Planificación. Es necesario plantearse si la estrategia de contenidos satisface los objetivos de la empresa.
- No utilizar un calendario de publicaciones. Es un recurso fundamental, especialmente para coordinar el trabajo de todos los integrantes del departamento de comunicación. De lo contrario, puede que la temática se repita mucho o no interese a los seguidores.
- Descartar el uso de múltiples plataformas y formatos. Engloba aquello que se denomina “web visual” y que va mucho más allá de los textos. Prestar atención a formatos como el vídeo o las infografías puede hacer perder lectores.
- Publicar informaciones o muy simples o demasiado complejas. No acertar e ir haciendo probaturas es un síntoma de no conocer a tu target. Aunque tampoco es negativo alternar noticias más sesudas con otras más sencillas, siempre y cuando lleguen al público adecuado.
- Desconocer las llamadas a la acción (call to action). Cada artículo lleva implícita una intención: informar, motivar, vender concienciar… Es recomendable saber transmitir a la audiencia el propósito del escrito y crear una reacción en ella.
- Crear contenido aburrido. La información tediosa y poco atractiva se identifica porque es repetitiva (ya la ha sacado la competencia), es rebuscada, carece de originalidad o bien se trata de un publirreportaje demasiado descarado.
El marketing de contenidos es mucho más que publicar posts. Ante unos usuarios impredecibles y ávidos de información la meta principal es conocer a nuestro nicho de mercado y ofrecerle los datos que busca.
Pablo Ros, Periodista, integrante del departamento
de Marketing y Comunicación de Innwise.
